Oso negro asiático *imágen de Google |
Estamos hablando de animales que pueden pesar de 50 a 120 kg y su permanencia en espacios tan reducidos les deja sin capacidad de movimiento, causándoles daños psicológicos además de graves atrofias musculares.
A demás de la falta de condiciones en la que tienen que sobrevivir estos animales, se ven sometidos al estrés y sufrimiento de los graves sistemas de extracción de bilis. La valiosa substancia considerada medicinal es extraída mediante un agujero en el abdomen del oso, el cual no se cierra nunca, dejando a los animales bajo peligro de infecciones, enfermedades como tumores, cáncer y muerte por peritonitis.
Una práctica injustificada ya que existen otras alternativas
Algunas plantas como el aloe vera, la violeta o el añil contienen propiedades curativas que pueden sustituir a las que “teóricamente” se encuentran en la bilis de oso.
Movimientos en contra
Aunque muchas veces sus técnicas me parecen inadecuadas y a veces dudo incluso del respeto que pueda sentir hacia los animales, he de admitir que veo el programa y confío en que sus reportajes sean reales.
Para que podáis haceros una idea de todo lo que os he contado en el post, en este episodio Frank de la Jungla desenmascara un almacén de osos vietnamitas, creado para la comercialización clandestina de la bilis de estos animales.
Para todos aquellos que queráis prestar vuestra ayuda y apoyar la causa la Fundación Animals Asia trabaja en la recuperación de osos explotados para extraer su bilis. Visita su web: www.AnimalsAsia.org